domingo, 29 de junio de 2014

Preparando un botiquín de viaje.

Antes de viajar no debemos olvidarnos incluir en nuestro equipaje un  pequeño botiquín de viaje que nos permita hacer frente a pequeñas urgencias. Hoy repasamos los productos y medicamentos que no pueden faltar en nuestra maleta.

No existe un botiquín de viaje tipo, sino que su contenido va a depender de muchos factores, principalmente de las personas que viajen y del lugar al que viajen. Aún así, hemos redactado una lista de medicamentos y productos imprescindibles para llevar en nuestro botiquín y estar prevenidos:

Material de cura:
  • Pinzas para la extracción de objetos.
  • Gasas estériles.
  • Suero fisológico: para la limpieza ocular o el lavado de heridas.
  • Apósitos: tiritas, vendas, esparadrapo o suturas quirúrgicas, para tapar o cerrar las heridas en caso de que sea necesario.
  • Antisépticos: tipo clorhexidina (Cristalmina®) o povidona yodada (Betadine®)
  • Pomada antibiótica, para evitar la infección de heridas o pequeñas quemaduras: por ejemplo Plasimine®, Bactroban®, Fucidine®, Silvederma® o Blastoestimulina® (esta última además con centella asiática que facilita la cicatrización)


Medicamentos para afecciones leves:

  • Suero oral: para evitar la deshidratación, ante diarreas y vómitos fuertes. En la farmacia podréis encontrar diversas marcas y presentaciones adecuadas para cada uno de los miembros de la familia.
  • Analgésicos: podremos elegir entre paracetamol (antitérmico y analgésico), ácido acetilsalicílico o ibuprofeno (analgésicos y antiinflamatorios).
  • Pomada antiinflamatoria: para calmar el dolor y la inflamación de pequeños golpes, caklambres o contracturas musculares, como Ibufen®, Voltaren®, Flogoprofenn®, Calmatel®, Radiosalil®...
  • Crema con corticoide o una pomada antihistamínica, para alergias en la piel o calmar las picaduras de insectos. Entre las cremas con corticoide tenemos desde las más suaves (Calmiox®, Vaspit®) hasta algunas un poco más fuertes (Alergical®). Existen también otro tipo de lociones, como el famosos After Bite®, muy útiles para calmar el dolor y picor justo después de la picadura.
  • Antihistamínicos orales, que no puede faltar en caso de personas alérgicas. 
  • Antidiarreicos. El viaje y los cambios de alimentación pueden provocar en muchas ocasiones diarreas, por lo que es importante tener a mano un antidiarreico. Sin embargo, su recomendación o no depende de la causa de la diarrea, NO es recomendable su uso en caso de que se presenten vómitos, fuertes dolores o fiebre.
  • Antiácidos o protectores: para pequeños trastornos estomacales, como Almax® o Gaviscon®.


Es muy útil poner una ficha dentro del botiquín con los teléfonos de emergencia del lugar de destino. En caso de que este botiquín vaya usarse siempre como botiquín de viaje o del coche, debe revisarse periódicamente su contenido comprobando la caducidad de los medicamentos (algo muy útil es añadir una hoja con el nombre y caducidad de cada uno de los medicamentos).

Después de que hayamos preparado lo básico, debemos tener en cuenta las necesidades particulares de los viajeros y los requisitos del destino.

Los Viajeros

Si entre los viajeros se encuentran personas con patologías crónicas (asmásticos, diabéticos, hipertensos...), deben llevar siempre encima su medicación. En el caso de los diabéticos insulino-dependientes, existen unas pequeñas bolsas nevera o carteras de frío donde poder transportar la insulina. 

Si el viaje es a otro país y va a realizarse en avión, os recomendamos informaros antes de los requisitos exigidos en el país de destino. Normalmente, se permite llevar en el equipaje de mano los medicamentos necesarios para un periodo de tiempo corto (se supone que el periodo de tiempo del desplazamiento desde el lugar de origen al lugar de destino), además de un informe médico traducido al idioma del país, donde un médico declara la necesidad de esa medicación. De todos modos, no todos los países son igual de restrictivos y esto puede no ser necesario, por lo que lo mejor es informarse en la compañía aérea o embajada del país.

Si además vais a realizar un viaje largo con niños, suele ser muy útil incluir en el botiquín un anticinetósido (antimareo), en la farmacia encontraréis distintos formatos en función de la edad del niño.

El destino

Una vez elegido el destino, os aconsejo que consulteis en esta página del Ministerio de Sanidad las vacunas obligatorias y recomendadas en función del tipo de viaje.

En cuanto al botiquín, si se trata de un destino de playa, no podéis olvidaros un buen fotoprotector (del 50+) y un buen after-sun, para regenerar y calmar la piel después de la exposición al sol (también os recuerdo no tomar el sol entre las 12:00 y las 16:00 horas). Si además se trata de un lugar exótico y tropical, debéis añadir al botiquín un eficaz repelente de insectos, podéis encontrar en el mercado distintos formatos como lociones, toallitas, pulseras..., además de algunos antimosquitos expecíficos para zonas tropicales, como Goibi extrem® o Relec® extra fuerte.

Por último, recordaros que es fundamental que durante todo el viaje el botiquín se mantenga fuera del alcance de los niños. Además, para que los medicamentos no se deterioren, debe estar alejado de la luz, la humedad y con una temperatura constante.


¡¡Que tengais un buen y seguro viaje!!



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